¿Sabe qué es una Scaleup?

Cuando la facturación de las startups crece un 20% anual durante más de tres periodos seguidos o alcanzan más de un millón de dólares en financiación se habla de Scaleups. Las Scaleups son aquellas empresas que iniciaron su actividad como startups pero que tienen la intención de expandirse, de alcanzar nuevos mercados, nuevos clientes y mejorar sus productos para hacerlos modernos e innovadores.

Estas empresas se caracterizan por ser perdurables en el tiempo, las Scaleups que fracasan representan un porcentaje muy reducido. Son empresas resistentes a la pérdida de empleos durante procesos de recesión, generan empleos a largo plazo. Las Scaleups impulsan el desarrollo profesional de sus empleados ya que a medida que crecen y amplían su plantilla, los trabajadores se mueven a mandos medios.

Por ello, estas empresas tienen un gran impacto en las economías y la generación de empleo, de modo que plantean un desafío que nos hace preguntarnos si es factible continuar aportando recursos a nuevas empresas, aún con el riesgo de que no superen sus 5 años de actividad, o empezar con una nueva tendencia basada en fomentar las Scaleups, empresas que ya han demostrado tener las bases para seguir creciendo.

Dar este paso le aporta numerosas ventajas como pueden ser la posibilidad de explorar nuevos mercados, nuevos productos y nuevas formas de hacer las cosas, sin embargo, deben ser empresas que tengan una gran capacidad de aprendizaje permanente, así como de vivir en un cambio constante.

En definitiva, para entender qué es una Scaleup podríamos decir que una startup es un bebé y una Scaleup un adolescente.

Pasando de emprendedor a empresario

Pasar de startup a Scaleup se basa en encontrar un modelo repetitivo, una tendencia. Esos son algunos de los pasos que debes seguir para lograrlo:

  • Elija el momento adecuado: lo primero que debe hacer antes de plantearse convertir su startup en una Scaleup es si es el momento adecuado para crecer. La etapa de crecimiento implica cierto riesgo y es importante escoger el momento idóneo para hacerlo. Para ello, le recomendamos que se haga estas preguntas:
    ¿Tiene el equipo adecuado para crecer? La estructura de trabajo es un arma  clave para el crecimiento de una startup. Debes contar con unos empleados capacitados y comprometidos con el éxito de la organización.
    ¿Son los clientes los que lo buscan? El hecho de que sean los mercados los que se acercan a usted es un fuerte indicador de que su marca se ha consolidado y posicionado en la mente de sus consumidores.
    ¿Tiene el capital suficiente? Para mantener a flote la compañía mientras las ventas superan la inversión necesitas tener cierta capacidad económica.
    ¿El crecimiento es compatible con su estilo de vida? A pesar de que su empresa esté preparada para ser escalada, no conseguirá el éxito si usted mismo no está preparado para el compromiso que implica.
  • Marketing a gran escala: encuentre la manera de comercializar su producto para encontrar clientes reales y no únicamente “los primeros clientes”. Hoy en día se requiere una gran apuesta por el marketing si se quiere destacar y ser capaz de escalar en medio de la saturación de información que reciben los consumidores a través de distintos medios. En este sentido el Growth Hacking puede ayudarle a crecer exponencialmente.
  • Automatice al máximo: el crecimiento de una startup requiere mucha actividad laboral, deberá plantearse los beneficios que puede traerle la automatización. A pesar de que en un principio supone una gran inversión de tiempo, verá que se amortizará en breve. Por ello, automatice el almacenamiento en la nube, la formación de nuevos empleados, el pago de facturas, etc. Podrá acceder a sus datos, contratar, estudiar el mercado, pagar, etc. mucho más rápido.
  • Objetivos medibles: no puede controlar lo que no puede medir. A pesar de que el objetivo primordial es crecer, hay que establecer ciertas metas dentro del proceso y así dividir el trabajo en objetivos más concretos y asumibles. Cuando nos ponemos pequeñas metas que se pueden realizar en un tiempo reducido nos entregamos más en su resolución.
  • Construya el equipo adecuado para escalar: el número de empleados de su organización deberá aumentar de forma significativa, asegurándole de que es un equipo cualificado y competente y estableciendo unas rutinas organizacionales que conduzcan su startup al crecimiento. No se trata únicamente de contratar sino de formar a tus empleados y retenerlos.

Los errores más comunes

Las necesidades de las Scaleups son distintas a las de una startup ya que requiere unas características concretas en lo que a capital, dirección, habilidades y procesos organizativos se refiere. Son algunos de los factores que ciertas empresas españolas no son capaces de asumir para subir ese escalón que permite definirse como una Scaleup. Estos son algunos de los errores más comunes que se cometen a la hora de hacer crecer una startup:

  • Centrar su crecimiento en el producto: tener un buen producto no lo lleva necesariamente a convertir su empresa en una Scaleup, el producto no lo es todo. No puede dejar de lado a tu cliente.
  • No retener el cliente: la retención del cliente es la parte más difícil del embudo de ventas y es importante poner el foco en ella ya que es imprescindible para poder crecer. Obviamente hay que invertir esfuerzos en conseguir nuevos clientes, pero no podemos olvidar la importancia de hacer que el cliente vuelva a comprar tu producto.
  • Creer en una fórmula mágica: no existe una varita mágica que haga crecer tu empresa, el crecimiento se basa en la suma de muchas pequeñas cosas que te permiten pasar al siguiente nivel.
  • No focalizar: uno de los errores que más se cometen a la hora de escalar es probar muchas cosas en pequeñas dosis en vez de centrarse en probar una sola. Es bueno experimentar, sin embargo, al probar demasiadas cosas sin priorizar no consigues profundizar. Céntrese en una sola y mide, corrige y vuélvalo a probar, si realmente no funciona después de haber agotado las posibilidades es el momento de cambiar.
  • Obsesionarse con la rentabilidad: a pesar de que los beneficios sean el objetivo del negocio es importante no obsesionarse con ello, pues puede afectar a sus clientes y sus relaciones con la empresa. Cuide el factor humano.
  • La miopía profesional: no se enamore de su producto, debe ser capaz de ir más allá y ser objetivo.

Si tiene una idea que desee validar o mejorar no deje pasar el tiempo, aprovecha cualquier oportunidad de hacer networking y compartir experiencias con personas con las que colaborar en un futuro.